Dirigentes de Cambiemos de Santiago del Estero armaron un escándalo en el cierre de listas para las elecciones provinciales, en medio de una feroz interna entre el PRO y la UCR que terminó con un diputado arrebatándole documentos a la apoderada.

La insólita escena se dio esta mañana en la puerta de los Tribunales de Justicia de la Provincia, cuando la apoderada del PRO, Felicitas Scaraffía, se disponía a presentar la lista de candidatos a gobernador y vice y de legisladores.

En ese momento, el diputado radical Jaime Díaz irrumpió molesto por el lugar que le dieron en la lista y no tuvo mejor idea que sacarle parte de la documentación que debía presentar ante la Secretaría Electoral. La bizarra escena continuó con la apoderada del PRO pidiéndole a los gritos que le devuelva los papeles, empujones incluidos, mientras el legislador cruzaba la calle a paso acelerado.

Finalmente, Cambiemos pudo presentar la lista aunque lo habría hecho media hora después del plazo legal (la fecha límite era el viernes, pero con un plazo extraordinario de dos horas esta mañana), lo que podría dar lugar a impugnaciones. Además, Scaraffía hizo una denuncia penal contra Díaz.

Detrás del escándalo se esconde una feroz pelea por el armado de la lista y frenéticas negociaciones durante el fin de semana para evitar una ruptura en Cambiemos, donde radicales y macristas tironearon por los cargos con posibilidades de entrar a la legislatura. De hecho, el motivo del enojo de Díaz fue que lo sacaron de la lista, donde aparecía en quinto lugar.

La tensión también estuvo detrás de la elección del candidato a gobernador. Desde hace meses se descontaba que sería el macrista Marcelo Lugones, pero hace dos semanas el dirigente amenazó con bajarse si la Casa Rosada no le brindaba apoyo financiero y político de cara a una elección que asoma como imposible.

Es que el ex gobernador Gerardo Zamora intenta volver al poder y tiene una intención de voto que supera los 60 puntos. En las legislativas nacionales, su esposa y actual gobernadora Claudia Ledesma obtuvo el 66% de los votos y le sacó 50 puntos a Cambiemos. El senador siempre tuvo índices de aprobación más altos que su pareja.

En ese contexto, el radicalismo se aseguró el primer lugar de la lista de diputados nacionales y le dejó al PRO la tarea de enfrentar a Zamora. Lugones exigió entonces que además de apoyo financiero, la Rosada le prometa un cargo para después de diciembre.